PRÓLOGO E INTRODUCCIÓN POR ORALIA LOMBERA REYES "MUSA PEREGRINA"
LIBRO ROSA VALDIVIA
AUTOR SERGIO ARMIN VÁZQUEZ MUÑOZ
“La rebelión consiste
en mirar una rosa
hasta pulverizarse los
dedos, sensación de estar perdiendo
mucha sangre por alguna herida que no ubico”.
Alejandra Pizarnik
Un
libro es continuidad de la vida que logramos hacer palpable a través de las
historias contenidas en sus páginas. Específicamente un cuento es el ejemplo
más significativo de ello. El autor de “Rosa Valdivia” Sergio Armin Vásquez
Muñoz, consigue en su segunda obra impresa centrar la atención del lector
precisamente en eso, la vida. Incursiona en la narrativa nuevamente con el pie
derecho. Nos muestra elementos en el ser humano, traza como el más hábil
cirujano el destino de sus personajes que sucumben ante la suavidad o la dureza,
la adversidad y lo bueno que se consigue al final del día. De lenguaje cotidiano y emotivo como hemos
encontrado en su trabajo anterior, nos presenta “Rosa Valdivia”, ejercicio
literario que sensibiliza al lector, produce sugestiones reflexivas,
percepciones muy sentidas y vividas, transfiriéndonos al universo de su cuento,
logrando comunicar situaciones que se convierten en el eje de la historia.
Además, teniendo una responsabilidad grande, la de reflejar aun sin proponerse
los ideales y principios del autor, el respeto por la mujer y repito, a la vida.
Concluí la lectura del cuento, además de tener claro que es garantía como
escritor, sé que Sergio Armin posee la creatividad de inventar, imaginar y
relatar historias. Observo en sus escritos en cuento, aclaro, un género
narrativo escrito en prosa y de breve extensión, análisis, síntesis, el brillo
de las costumbres y tradiciones, el deseo de expresión de los pueblos, elementos
que producen un sólo efecto, tener la mirada del lector en el centro del corazón
de la historia. Cabe mencionar que lo interesante de este cuento es la técnica
narrativa, el estilo distinto, pero sobre todo la intensión no necesariamente
moralizante en su forma y contenido, rompiendo la estructura lineal del cuento
clásico y ofreciendo un desenlace sorpresivo. Además de agradecerle ser un
narrador que me seduce al reflejar el calibre de su capacidad literaria, me
siento honrada de acompañarle con mis ojos de prologuista, ya que disfruté su
exquisita sencillez lingüística, descubrí una faceta nueva en él como escritor,
ya que desconocía su saber de hablar con el dolor, el sentir, la emoción de
nosotras las que en algún momento enmudecimos ante nuestros monstruos, las que
callamos por temor, ignorancia, cobardía, orfandad emocional. “Rosa Valdivia”
nace con el deseo de su autor de que algunas de aquellas mujeres atadas a
costumbres amargas, tradiciones crueles, las que culturalmente son víctimas de faltas
al respeto y dignificación ante la familia y la sociedad, el mensaje de su
cuento sea el bálsamo, el resquicio de luz por donde se filtre el instante en
el que ellas logren articular palabra, griten con todas sus fuerzas, se liberen
en cualquier lugar del mundo en donde se desconozca el significado de la
palabra amor, que sean escuchadas, amadas, primero por ellas mismas, para
después romper las memorias de dolor de tantas que no consiguieron lograrlo y
se resignaron a morir en vida, antes los ojos de sus hijos, nacidos de golpes
en su alma, esclavos del desamor por añadidura, heredando el miedo de la
abuela, la madre, la hija, la nieta que no logró defender su existencia
llorosa, infortunada. Dedicado a ellas, las que se fueron con los ojos
cerrados, con el viento entre los brazos…
Oralia Lombera Reyes
“Musa Peregrina”
Escritora Guerrerense.
INTRODUCCIÓN ROSA VALDIVIA
Tristemente aún existen lugares en el mundo con millones de historias de niñas que
no tuvieron la suerte de crecer en hogares en donde sus padres las protegiesen
de los peligros, niñas que crecieron sin amor y sin respeto de sus
progenitores, nacidas con la mala suerte de ser mujeres y la sentencia de
enfrentar un mundo en el que tal situación fuese usada en contra de su dignidad
y respeto. Niñas que son casadas por la fuerza o conveniencia a muy temprana
edad y dicha práctica las alejó de su derecho a serlo. Niñas que no tuvieron la
fortuna de estudiar, de habitar los pupitres en las aulas con sus risas y
alegría, las que fueron tratadas como mercancía, viviendo tragedias de
violencia doméstica, embarazos precoces, no planificados a muy temprana edad,
causándoles mortalidad materna. La niñez debería ser la etapa maravillosa del
ser humano, pero no todos tienen la dicha de vivirla de esa manera. Muchas de ellas
crecen en condiciones graves con consecuencias que afectan su salud mental,
sufriendo violencia física y sexual, siendo propensas en su gran mayoría a la
brutalidad del hombre, además de afectarles en su bienestar, las aísla de
participar en sus comunidades. La sociedad prefiere mirar a otra parte, una en
la que ven estos actos de manera común y normalizan la crueldad con la que es
afectada la infancia. La población adolescente vulnerable está allí, esperando
por esa labor de sensibilización mundial que motive a terminar con esta
realidad innegable, evitando los terribles daños colaterales de bodas
prematuras, siendo crucial el trabajo con las familias, para erradicar la forma
de pensar de quienes aceptan dichos actos como un estilo de vida normal. Es
importante adoptar medidas integrales de protección al menor, abrir más
escuelas, poner en marcha servicios sociales, de salud sexual y reproductiva,
todo lo que logre no privar a las niñas de su infancia. Rescatarlas de las
cuatro paredes que atemorizan su derecho a la vida, orientar la mirada hacía un
mundo mejor, real, no imaginario. Lograr que la familia sea el recinto sagrado
en donde se geste el amor en cada uno de sus miembros, con igualdad de género,
con oportunidad de desarrollo y libertad.
Oralia Lombera Reyes
“Musa Peregrina”
Escritora Guerrerense.
